Hace casi una semana que volví de la Costa Brava y aún lo sigo recordando. Como si estuviese recién aterrizada de uno de los viajes más maravillosos de mi vida y con una selección de mis fotos favoritas del viaje. Las que mejor definen lo que hemos vivido durante una semana en familia y con las que compartiré mis tips de esta preciosa zona. Sus playas y paisajes maravillosos, sus atardeceres desde una hamaca, los paseos por sus pueblecitos y nuestros momentos bon vivant.
La Costa Brava es la zona costera de España que empieza en Blanes, y acaba en la frontera con Francia en Portbou. Esta franja litoral tiene una extensión de 214 km y está comprendida por las comarcas catalanas del Alto Ampurdán, el Bajo Ampurdán y La Selva, pertenecientes a la provincia de Gerona. La Costa Brava es sol, calas escondidas entre la vegetación, baños refrescantes, aguas cristalinas, tranquilidad, paseos por los caminos, poblaciones marineras con encanto…
Con Valentina llegar temprano a la playa resultaba imprescindible para encontrar un hueco cerca de la orilla del mar. Visitar la Cala de Aiguablava se convirtió en uno de nuestros planes favoritos, y los días pasaban entre juegos en la arena y baños refrescantes. Por las tardes, después de comer y una siesta, ella disfrutaba zambulléndose en la piscina.
A nosotros nos encantaba visitar los maravillosos pueblitos que hay en toda la zona y pasear por sus calles: Peratallada, Llafranch, Begur,… y a ella tomar un helado antes de la cena. Después, solíamos disfrutar de la amplia propuesta gastronómica que ofrece la zona. Nuestros preferidos: Comedor Verdor (Pals), un restaurante ubicado en un pajar junto a un huerto con plantas aromáticas cultivadas sin productos químicos. Se sirven a la carta verduras y aliños. La materia prima es una absoluta delicia, el pan es casero y el pescado llega del puerto de Palamós o Mas Sorrer (Gualta), un curioso bar de jazz situado en un campo de girasoles. Su dueño, Gerard Argemie, lo montó cuando, por problemas respiratorios, no pudo continuar con su verdadera vocación: tocar el saxofón. En Mas Sorrer, los girasoles iluminados brillan en la noche.
Además descubrimos, adentrándonos más al interior, la zona del Ampurdán. Un lugar rico en detalles, viñedos infinitos, un paisaje interior cambiante, pueblos repletos de joyas de arquitectura medieval y una gastronomía exquisita.
Todas las imágenes son de Querida Valentina
Peto verde agua: Trixi Kids, Blusa blanca: Nícoli, Ranita color arena con volantes: Mi Canesú, Manicura: Salón Toro