Javier le pidió la mano a Paula en el Ponte Vecchio de Florencia, en un viaje con que la sorprendió en Reyes.
Decidieron casarse en Madrid, a pesar de que Paula es de Gijón, pues no querían retrasar mucho el enlace.
Su vestido de novia fue diseñado por Isabel Núñez. Los zapatos eran de Pura López, encargados en color champagne por Zapatería Voga de Gijón. Su ramo de novia fue realizado por Floreale. El anillo de pedida y los pendientes de Paula, regalo del novio, fueron realizados por un amigo joyero de él.
Del peinado y maquillaje de la novia, así como el de su hermana y el de su madre, se encargó Virginia Melón.
El novio vestía chaquet de Boda 10, de Madrid. Sus zapatos eran un modelo clásico en color negro de Lotusse.
Las alianzas de boda fueron un regalo de la madre del novio.
La ceremonia religiosa tuvo lugar en la iglesia de la Inmaculada y San Pedro Claver. La celebración posterior tuvo lugar en la Finca El Campillo, en El Escorial.
De toda la decoración se encargó More than Events. Las mesas se combinaron redondas y cuadradas, con manteles de lino y flores de color aguamarina. El menú fue servido por el Mentidero de la Villa.
El vino fue de la bodega de la familia del novio, Bodegas Durón y las botellas estaban serigrafiadas con sus nombres y la fecha de boda.
De todo el reportaje fotográfico se encargó Belleepok y el resultado no podría ser más bonito.
Bárbara
noviembre 23, 2016Muy guapa esta novia,clásica y con mangas largas,una pena que no se vea el vestido más de cerca.