Adriana y Álvaro se conocieron en el verano de 2006 en Múnich, cuando ella fue a visitar a unos amigos y Álvaro estaba allí estudiando. Desde el primer momento hubo un flechazo.

Con el paso del tiempo se hicieron inseparables y en Noviembre de ese mismo año empezamos a salir y, poco a poco, se dieron cuenta de que se habían convertido en compañeros de viaje en esta aventura que es la vida, su vida desde Múnich.

Casi diez años después, Álvaro sorprendió a Adriana en la playa del palmar en Cádiz (uno de sus sitios favoritos) pidiéndole matrimonio y ella…¡aceptó encantadísima, por supuesto!.

En cuanto a la finca, buscaban un sitio donde poder organizar una ceremonia civil. Cuando visitaron El Chaparral lo tuvieron clarísimo desde el primer momento, un sitio cómodo, acogedor, moderno y elegante… Lo cerraron todo con los proveedores que les ofrecieron. Exquisito trabajo de decoración y ambientación en todos los momentos de la celebración. En palabras de Adiana: «Inmejorable».

Su vestido era 100% su estilo. Un vestido de crepe de manga larga muy sencillo con vivos plateados y una cola muy larga, con escote a media espalda redondeando. También llevaba un pequeño tocado, una peina de hojas plateadas. Llevaba zapatos, hechos a medida, en piel rosa palo.

En la ceremonia, dijeron unas palabras una de las hermanas de Álvaro, su marido y dos de sus sobrinos. Después hablaron sus íntimos amigos Marina y Rafa, Marina además les ayudó muchísimo con todo durante toda la organización y también a vestirse. Después fueron sus votos.

Ellos quedaron enormemente contentos con la boda, tanto que si volviesen a casar repetirían todo. Sería difícil que les gustase más.

+ Vestido de novia: Cristina Valenzuela +

+ Zapatos: Resán +

+ Niños: Teresa y Leticia +

+ Fotografía: Alma Fotografía +

+ Celebración: Finca El Chaparral +

+ Catering: Ciboulette +

+ Flores: Aquilea +

+ Música: Dándote Ritmo +