Todas las entradas deCristina Duarte

Siempre recibo con gran ilusión todos vuestros mails contándome los detalles de vuestras boda, pero cuando ese mail lo escribe el padre de la novia la ilusión es aún mayor.

José Luis me escribió para contarme la historia de amor única y maravillosa de su hija Indira. Y es que cuando ella le comunicó que se casaba, supo que tendría ante él el mayor reto personal y profesional al que jamás se había enfrentado. Personal, porque no hay momento más especial para un padre que acompañar a su hija al altar, y profesional porque a pesar de llevar más de veinte años dedicado al estilismo en cada una de las novias que pasan por sus manos, éste era sin duda el más importante de sus trabajos: peinar a su hija en el día de su boda.

José Luis me cuenta como a lo largo de estos meses, mientras Indira buscaba inspiración para su gran día, mi blog se convirtió en el punto de unión de toda la familia y la tarde de los viernes pasó a ser la tarde del café y el repaso del blog. Y fue así, sin darse cuenta, cuando yo me fuí haciendo un hueco en sus charlas. Es por esto que sé que a Indira le haría mucha ilusión ver su boda publicada.

Indira es la mayor de dos hermanas. Ella y Desirée, que su padre José Luis me confiesa que lo son todo para él. Y si hay algo que le enorgullece especialmente es de la relación que ambas mantienen. Se adoran, son parte inseparable la una de la otra, así que también Desirée es cómplice de relatarme todos los detalles de su gran día.

Vanesa me escribió contándome que era fiel seguidora del blog desde que comenzó a organizar su boda. Ahora que en Agosto será madre sigue leyéndolo pues mis post sobre niños y maternidad le resultan muy útiles – Aprovecho para darte la enhorabuena por tu próxima maternidad.

Ricardo y ella son médicos y se conocieron en el trabajo. Vanesa llevaba un par de años en el mismo hostpital cuando un día apareció Ricardo y… surgió el flechazo!. Desde entonces no se han separado. A los pocos meses de conocerse la idea de casarse comenzó a estar presente en sus vidas cada vez con más fuerza hasta que Ricardo le pidió matrimonio por sorpresa con un precioso anillo de Tiffany &Co.

Claudia conoció a Carlos en una cena a la que la llevó una amiga mía, acababa de romper una anterior relación y ¿quién le iba a decir que esa noche conocería al hombre de su vida?. Desde aquel día no se separaron.

La ceremonia religiosa se celebró en el Santuario de Nuestra Sra. de las Caldas y la celebración posterior en una finca privada en Cantabria. La familia de Claudia tiene una casa en Pechón, un pueblito situado entre Asturias y Cantabria, al que suelen ir todos los veranos. Tanto a Carlos como a ella les encanta el norte y decidieron darse el «sí quiero» allí.

Elena se declaraba loca enamorada de mi blog, del que me confiensa siente como un trocito suyo por el cariño con el que escribo cada boda, y resulté ser fuente de inspiración para ella durante todos los preparativos de su boda.

Después de 5008 días de noviazgo, se dieron el «Sí quiero» en la iglesia de Nuestra Señora de la Consolación de Cazalla de la Sierra, Sevilla. A pesar de residir Elena en Huelva y Salvador en Sevilla, se conocieron en su pueblo y contrajeron matrimonio en el mismo lugar que lo hicieron sus padres.