Como ya sabéis, pues lo he ido contando en RRSS, para el bautizo de Camila no podía llevar cualquier vestido. Tenía que ser algo especial, diferente y que me hiciese verme guapa en ese día. Por eso decidí hacerlo con Blanca y Mireia de Broken Basics. Quería algo a medida y que juntase varias ideas que tenía en mente. Un vestido de su atelier (c/ Travessera de Gràcia, 123 – Barcelona) minuciosamente pensado y cosido a mano con mimo.
Quería un estampado de lunares que me había enamorado hace tiempo. La falda jugaría con diferentes largos, dando un efecto más corto por delante que por detrás y tanto las mangas como el bajo llevaría un amplio volante. Me apetecía esta idea aunque fuese más veraniega para la época, celebrábamos su bautizo a dinales de Marzo, pero esos topos en blanco y negro eran tan alegres que eran sinónimo de acierto.
