Elena se declaraba loca enamorada de mi blog, del que me confiensa siente como un trocito suyo por el cariño con el que escribo cada boda, y resulté ser fuente de inspiración para ella durante todos los preparativos de su boda.
Después de 5008 días de noviazgo, se dieron el «Sí quiero» en la iglesia de Nuestra Señora de la Consolación de Cazalla de la Sierra, Sevilla. A pesar de residir Elena en Huelva y Salvador en Sevilla, se conocieron en su pueblo y contrajeron matrimonio en el mismo lugar que lo hicieron sus padres.
Su vestido, creado a medida, encajaba a la perfección con su personalidad. Estaba compuesto por vestido de crêpe de seda en blanco roto, con escote en V a la espalda y cola plisada. La segunda cola, de seda «abambulada», de 3 metros, salía desde la cintura para dar longitud y dejar ver la interior.
El velo, también del mismo tejido, dejaba ver la pieza principal, una tiara confeccionada a medida en porcelana y oro viejo, con una drusa en el frontal.
La celebración tuvo lugar en una bodegas con dos zonas diferenciadas, un patio exterior donde se sirvieron tanto la recepción como la barra libre. Y, la bodega, donde fue servido el almuerzo.
Fotografía: JMCV Producciones
Vestido de novia: García Forcada, Tiara: Petrita, Maquillaje y peinado: Belisse, Zapatos: Uniqshoes, Celebración: Bodegas Miura
María
abril 24, 2017Una novia novia como tiene que ser con mangas largas y velada.