He de reconocer que tengo una nueva obsesión: el dip-dye!. Comencé con las míticas cestas en tonos flúor o blanco y después la tendencia llegó a mi pelo, con un efecto ombré en las puntas. Y hoy me he despertado con la idea de trasladar este fenómeno a una inspiración wedding.
Quizá como vestido de novia sea demasiado arriesgado y probablemente pocas de nosotras nos atreveríamos con esta propuesta, pero sí puede aplicarse a detalles deco que se ven absolutamente increíbles y realmente son una inyección de única de energía y color.
Para más inspiración, puedes seguirnos en Facebook, Twitter e Instagram.